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Descubre cómo limpiar sillas de oficina paso a paso y de forma efectiva. Los mejores trucos para limpiar sillas de escritorio de forma fácil.
La limpieza exhaustiva de oficinas es un trabajo fundamental. No únicamente para mantener una buena imagen de nuestras instalaciones de cara a los clientes que puedan venir a visitarnos, sino también por la salud y el confort de nuestros trabajadores. Esto último es esencial si queremos mantener un buen ambiente de trabajo.
Las sillas de oficina también son un punto clave para conseguirlo. Debemos decantarnos por elegir sillas ergonómicas y cómodas, que eviten problemas a nuestros trabajadores, que pasarán horas sentados en ellas.
Y, sin duda alguna, una limpieza adecuada es esencial. Es por ello que hoy, como especialistas en limpieza de oficinas, te contamos cómo limpiar sillas de oficina. Si quieres descubrir los trucos y consejos, ¡continúa leyendo!
Cómo limpiar sillas de oficina en 4 pasos
1. Aspirar el polvo
El primer paso que debemos poner en práctica para la limpieza de sillas de oficina, especialmente las de tela, es comenzar aspirando. Usaremos la potencia más baja de nuestra aspiradora para eliminar el polvo y los pequeños residuos sólidos que hayan podido quedar por el respaldo, el asiento o los reposabrazos.
Aunque con un resultado menos eficaz, también podemos usar una toalla de papel para eliminar los residuos que pueda haber.
2. Limpiar las manchas
Es probable que a la hora de ponerte manos a la obra con cómo limpiar sillas de oficina, puedas encontrarte con alguna mancha superficial. ¡Es el momento de eliminarla!
¿Cómo podemos hacerlo? Con algo tan sencillo como agua tibia y jabón de lavavajillas, por ejemplo, y con ayuda de un paño. Por último, solo tendrás que poner a secar la silla en una zona con buena ventilación. Así evitaremos un mal secado que pueda dar lugar a problemas de humedades.
3. Las manchas más difíciles
Si las manchas son más complicadas de eliminar, no te preocupes, ¡también tiene solución! Puedes probar a utilizar un producto quitamanchas especializado o simplemente usar alcohol, que tiene un gran poder de limpieza.
Muy importante: no limpies directamente con el producto. Haz primero una prueba en una zona discreta de la silla. Si comprobamos que no produce ningún daño en el tejido, es el momento de utilizarlo sobre la mancha.
Eso sí, recuerda no frotar nunca sobre ella, pues puede acabar debilitando y provocando daños en el material de la silla de oficina.
4. Las ruedas
El asiento, el respaldo o el reposabrazo son las partes que más se ven, sí, pero no son las únicas que debemos de tener en cuenta a la hora de saber cómo limpiar sillas de oficina. Hay otros aspectos de los que tampoco nos debemos olvidar, como las patas o ruedas.
Si tiene ruedas, lo mejor será limpiarlas a conciencia, eliminando la suciedad que haya podido quedar incrustada dentro de la carcasa. Para acabar, la mejor opción es lubricarlas para que rueden de manera más suave y fluida.
Cómo limpiar sillas de oficina de piel o polipiel
Piel
En el caso de las sillas de piel, es fundamental un cuidado seguido del tapizado para que no se deteriore. Este mantenimiento debe estar basado en la limpieza e hidratación.
Utiliza un producto específico para la limpieza de cuero y aplica posteriormente un hidratador especializado para productos de piel.
Polipiel
Si quieres saber cómo limpiar sillas de oficina de polipiel, puedes hacerlo de forma sencilla retirando primero el polvo y usando posteriormente un spray de agua jabonosa o incluso con una pequeña disolución de amoniaco. Usa siempre paños de microfibra para la limpieza, pues evitarán dañar la superficie.
Esperamos que este artículo te haya servido para descubrir cómo limpiar sillas de oficina. Si quieres conocer más consejos, ¡continúa visitando nuestro blog!